La minería ilegal se ha vuelto la principal causa de muertes en el nordeste antioqueño, que deja más de 220 homicidios en el último año.
Recordemos que quienes practican la minería ilegal en el nordeste antioqueño es la asociación de mineros ancestrales de la Mesa Minera, que han sido acusados de la comisión de diferentes actos terrorista en el municipio y de crímenes de lesa humanidad.
Los altos precios del oro hoy han convertido a este mineral en un mecanismo perfecto e ideal para delitos como el lavado de dinero, y por ende detrás de este tipo de intereses hay también organizaciones criminales como guerrillas, paramilitares y bandas criminales en general que cobran altas vacunas para permitir la operación de dichas “minas” y que en muchos casos, son quienes después compran el producido por estas para seguir alimentando sus negocios criminales y su poder en la región.
La Mesa Minera lideró el paro minero que se llevó a cabo durante el segundo semestre del año 2017 que sólo dejó desabastecimiento y hambre, 4 personas asesinadas, niños sin poder ir a estudiar y decenas de miles de mineros y comerciantes sin ingresos por más de 45 días, y todo con el único fin de empoderar aún más a las mafias en los municipios de Segovia y Remedios sin importar las consecuencias.