El 15 de noviembre se leerá el escrito de acusación a Jorge Iván Ospina el recién elegido alcalde de Cali por un contrato supuestamente irregular, que no firmó él sino su secretario de despacho.
En el año 2008 durante la primera gestión de Ospina como alcalde de Cali, su secretario de despacho Pedro Luis Barco, autorizó un contrato de servicios de publicidad por $460 millones a la compañía Vision Digital, cuyo dueño es Guillermo Rafael Lombana, un experto en comunicaciones quien había asesorado la campaña de Ospina.
Este contrato se firmó en abril de ese mismo año y se acordó que la administra municipal daría un anticipo del 30% que correspondía a $138 millones. Desde entonces el tesorero de la Alcaldía advirtió las anomalías al secretario Barco, ya que la empresa había sido creada dos días antes de la firma de este contrato.
La Fiscalía manifiesta, que Barco ante las advertencias del tesorero dio por terminado el contrato, sin embargo, un mes después el secretario contrató de nuevo con Lombana pero como persona natural, y la cuantía del contrato se fijó por cinco pesos menos que la cifra fijada en el contrato inicialmente.