Una noticia mueve hoy el panorama político en San Andrés: ¿El gobernador encargado, contralmirante Juan Francisco Herrera Leal estaría favoreciendo la campaña de Everth Hawkins?
En los últimos días, el gobernador destituido del Archipiélago de San Andrés, contralmirante Juan Francisco Herrera Leal, ha salido al paso a unas declaraciones de un supuesto favorecimiento de su administración a la campaña del candidato Everth Hawkins Sjogreen, avalado por el partido de la U, para la gobernación de San Andrés.
En el portal 45 segundos (no 45 minutos, doctor Herrera) se afirma que el nombramiento a cargos dentro de la gobernación estaría favoreciendo la campaña de Hawkins. Estos funcionarios buscarían influir en el proceso electoral con la influencia que obtienen al ser parte de la administración pública.
Herrera ha solicitado una retractación pública al portal noticioso por estas declaraciones, aduciendo que no hay pruebas que sustenten estas afirmaciones. Hasta el momento, desde 45 segundos, no ha habido movimientos al respecto.
La carga probatoria, de esta manera, recae en el portal, quien tendrá que argumentar su afirmación o retractarse, si no cuenta con los argumentos necesarios para mantener su posición. No obstante, el caso está rodeado por ciertos interrogantes que producen un ambiente de muchas suspicacias. La primera de estas es la demanda que interpuso el Partido de la U, en cabeza de su director en el Archipiélago, Carlos Alberto Bryan Uribe. Aunque una colectividad está en todo su derecho de ejercer este tipo de acciones legales, sorprende la fecha en la que lo realizaron: el mismo día cuando se posesionaba la nueva gobernadora encargada Tonney Gene Salazar. La demanda es, básicamente, un pedido de nulidad a la candidatura de Nicolás Gallardo, por pertenecer al partido político que avaló a los anteriores gobernadores (aunque Bryan Uribe omite que su partido también avaló a Ronald Housni, gobernador suspendido y encarcelado por actos de corrupción).
Según la normativa colombiana, a un partido político se le puede suspender su derecho a lanzar candidatos a elecciones públicas, cuando sus directivos no los hayan elegido con el criterio y la idoneidad suficiente. Aunque la demanda pueda tener algún peso argumentativo, ¿por qué hacerlo precisamente en la misma fecha cuando es elegida Gene Salazar? Es decir, era de público conocimiento toda la situación, no es un escándalo que estuviese en secreto y que, coincidencialmente, se diera a conocer el mismo día del cambio en el Coral Palace. Perfectamente el partido de la U, y su director Bryan Uribe, pudieron demandar la candidatura de Gallardo el mismo día en que se inscribió, hace más de 5 meses. ¿Acaso están utilizando la demanda para contrarrestar la salida del contralmirante de la gobernación?
Por otro lado, Everth Hawkins, y sus copartidarios, han defendido, desde que salió la noticia en 45 segundos, la administración de Herrera Leal. Han señalado la buena gestión que tuvo en el casi un año que estuvo al mando de las islas. Además, han buscado desmentir la cercanía entre la campaña de Hawkins y la gobernación de Herrera Leal. El porqué aunar estos dos argumentos también puede producir desconfianza en la ciudadanía: mientras defienden la administración de Herrera Leal, buscando que salga del puesto con toda legitimidad posible, declaran estar distanciados de su administración.
Se deben esperar las pruebas. Sin embargo, a todas luces parece una reacción de la campaña Hawkins, y los partidos y movimientos que lo avalan, por responder ante la pérdida que acaban de sufrir: la gobernación. De ahí la demanda ante la candidatura de Nicolás Gallardo.
Si ustedes nos quitan la gobernación un mes antes de las elecciones, nosotros les quitamos la candidatura, parecen decir los miembros del partido de la U. Si ustedes atacan a nuestro gobernador (Herrera Leal), nosotros empezaremos a atacar a Gene Salazar, parecen decir Hawkins y sus seguidores. ¿He ahí el cambio político que necesita San Andrés?