1 millón de metros cuadrados para carreras de carros y motos de corte mundial, parque urbano, senderos ecológicos, además de espacio para conciertos de hasta 100 mil personas, con servicios de bomberos y salud son las principales bondades que ofrece el proyecto Central Park de la Gobernación de Antioquia en el lote Tulio Ospina. ¿Su valor? 120.000 millones de pesos.
Pero eso podría no ocurrir en los plazos estimados y el plan podría convertirse en un caso importante de corrupción, debido a 3 grandes irregularidades que involucran a la administración municipal de Bello y que no ha han sido resueltas.
A pesar de esto, la construcción en el Valle de Aburrá ya tiene contratista, Ingeniería y Construcciones S. A. S, con trayectoria en construcción y reparación vial y construcción de redes hidrosanitarias en Antioquia y otras regiones. La ejecución está andando.
El principal problema del proyecto es su naturaleza, incompatible con las normas establecidas en el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) del municipio, de acuerdo con la Veeduría Ciudadana. Ese documento no ha sido modificado.
Al ser una obra de alto impacto, por la contaminación sonora que generará a su entorno, está prohibida para un espacio como el lote Tulio Ospina y sus alrededores.
El diputado Luis Peláez, líder de la Veeduría, recuerda que la normativa obliga a que el autódromo se construya en una zona rural, donde cumpla con los requisitos de manejo del ruido.
Terreno propiedad de Bello
El segundo eje fundamental que afianza la tesis de la ilegalidad es la propiedad que tiene el municipio de Bello sobre 12 % de las 97 hectáreas del terreno.
El predio fue cedido en 1973 por el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) a los municipios del Valle de Aburrá, proporcionalmente con el tamaño de la población.
De acuerdo con la información que emitió en julio la alcaldesa encargada Viviana Zapata, ante la Contraloría, no hay evidencia de que se haya renunciado formalmente a esa parte del predio y se haya entregado a la Gobernación, como alegó el departamento.
“Verificado el archivo de la entidad, no ha sido posible ubicar acto administrativo y/o actuación administrativa que dé cuenta de presunta renuncia o no aceptación de los derechos que le corresponderían a Bello, derivados de la escritura pública otorgada por el ICA en 1973”, sostuvo la autoridad.
Incluso, la Personería de Bello presentó documentos del 20 de febrero de 2014, en los cuales el anterior alcalde Carlos Alirio Muñoz aceptaba formalmente los derechos cedidos por el ICA sobre el lote Tulio Ospina.
Es decir, el proyecto estaría violando el derecho a la propiedad, salvo que los involucrados en la obra presenten la prueba del traspaso legal de casi 12 hectáreas de terreno al Área Metropolitana.
Condición del ICA para ceder el lote
Para que el Instituto Colombiano de Agricultura entregara el lote Tulio Ospina a los municipios, puso como condición en la escritura pública que el espacio fuese destinado a un parque popular urbano público.
Pero, en contraste, el diputado Contreras advierte que el autódromo sería escenario para eventos privados, lo que contravendría la principal exigencia para dejar parte del predio al municipio.
Toda esta lista de hechos irregulares fue presentada por el líder de la Veeduría y el congresista Jorge Gómez ante el procurador general de la Nación, Fernando Carrillo Flórez, a quien le solicitaron ejercer “control preventivo sobre el proceso de planeación, diseño y contratación del proyecto Central Park” y proteger la inversión de esos 120.000 millones de pesos.
Sobre las acusaciones, el gobernador Luis Pérez Gutiérrez asegura que el proyecto avanza con todos los permisos necesarios, además de los recursos.
Dice que no hay irregularidades en la contratación y argumenta que “todo el mundo” podrá asistir al parque que, en teoría, estaría listo para finales de 2019.